El calzado de montaña se distingue del calzado de senderismo; aunque a menudo se confunden, cada práctica requiere su propio equipo especializado. El calzado de montaña, diseñado para condiciones más extremas, destaca por sus superiores propiedades impermeables y térmicas además de tener mejor protección en laterales y puntera para proteger el pie en entornos más agresivos.. Está preparado para resistir ambientes helados y nevados, y es compatible con crampones. El alpinismo es un deporte técnico que demanda materiales de alta calidad.
"La aventura comienza con un buen par de botas."
Categorías de calzado de montaña
Las podemos englobar en dos grandes grupos.
Botas de alta montaña: diseñadas para alpinismo y ascensos técnicos. Altamente resistentes, impermeables, con aislamiento térmico y compatibles con crampones para hielo y nieve.
Botas para expediciones: pensadas para largas expediciones en condiciones extremas. Máxima protección contra el frío, aislamiento extremo, compatibles con polainas, y uso de tecnologías avanzadas para mantener los pies sin humedad y lo más cálidos posible.
La rigidez de la suela
La elección de la rigidez de la suela depende del tipo de actividad de montañismo que realices. Las suelas más rígidas proporcionan más soporte y estabilidad en terrenos difíciles, mientras que las suelas más flexibles ofrecen mayor comodidad en caminatas menos exigentes. El cambrillón juega un papel esencial en la estructura y la rigidez de la bota, garantizando soporte y durabilidad.
El cambrillón es una pieza interna de refuerzo situada entre la suela y la plantilla de la bota. Su función principal es proporcionar rigidez longitudinal y soporte al arco del pie. Los cambrillones están hechos de diversos materiales, como acero, fibra de vidrio, carbono o plásticos reforzados, y contribuyen significativamente a la rigidez y durabilidad de la bota.
" las suelas más rígidas ofrecen mayor soporte y estabilidad en terrenos difíciles"
Evalúa el terreno principal de tus actividades; terrenos más accidentados y técnicos requieren suelas más rígidas para prevenir la fatiga y el dolor en los pies durante caminatas largas. Asegúrate de que las botas tengan la rigidez y el diseño adecuados para la compatibilidad con crampones necesarios. La elección de la rigidez de la suela depende del tipo de actividad de montañismo; las suelas más rígidas ofrecen mayor soporte y estabilidad en terrenos difíciles, mientras que las suelas más flexibles brindan comodidad en caminatas menos exigentes, con el cambrillón esencial para garantizar soporte y durabilidad.
Por ejemplo:
En terrenos moderados y senderos mixtos, unas botas con suelas semi-rígidas proporcionan un buen equilibrio entre flexibilidad y soporte, ideales para trekking de varios días en montañas como los Pirineos.
Para escalada técnica en roca o hielo, se requieren botas con suelas extremadamente rígidas que permitan una excelente transferencia de energía y estabilidad en superficies verticales. Un ejemplo sería escalar en el Mont Blanc, donde las condiciones pueden variar desde hielo duro hasta rocas escarpadas.
En expediciones alpinas que incluyen travesías sobre glaciares y ascensos a picos técnicamente exigentes como el Aconcagua en los Andes, las botas con suelas rígidas son esenciales para soportar el uso de crampones automáticos y proporcionar la estabilidad necesaria en terrenos mixtos de nieve y roca.
La elección de los crampones
- Compatibilidad: Asegúrate de que los crampones sean compatibles con el tipo de bota que estás utilizando. Verifica si tu bota tiene las ranuras necesarias para crampones automáticos o semiautomáticos.
- Actividad: Considera el tipo de actividad que realizarás. Los crampones más técnicos son necesarios para ascensos técnicos y escalada en hielo, mientras que los crampones de correas son suficientes para caminatas en glaciares y montañismo general.
- Ajuste: Elige crampones que se ajusten bien a tu bota sin quedar sueltos ni demasiado ajustados. Un buen ajuste es esencial para la seguridad y el rendimiento.
- Material: Los crampones de acero son más duraderos y adecuados para terrenos técnicos y rocosos, mientras que los crampones de aluminio son más ligeros y adecuados para nieve y hielo no técnicos.
Aislamiento térmico
Normalmente encontraremos en las descripciones técnicas de las botas los rangos de temperaturas a las que usarlas. A día de hoy todas incluyen una membrana impermeable transpirable pero el aislante térmico varía. Algunas botas utilizan materiales como la lana, el fieltro, el poliéster o el Primaloft, que son conocidos por su capacidad para retener el calor al atrapar el aire caliente cerca del pie.
En botas diseñadas para condiciones extremadamente frías, el cuello de la bota a menudo está equipado con materiales aislantes y es ajustable para sellar el calor alrededor del tobillo.
El nivel de aislamiento térmico necesario dependerá del tipo de actividad y del entorno en el que se va a utilizar la bota.